El modelo regional es más sencillo de aplicar, es más fácil acogerse al mismo para las explotaciones agrarias y permite que no haya recortes para las mismas. COAG CASTILLA Y LEÓN ha solicitado que el pago por ecoesquema individual de cada perceptor priorice a los agricultores y ganaderos profesionales, y que se establezcan topes máximos para evitar que acaparen los fondos las grandes explotaciones.
Valladolid, 26 de marzo de 2021. Después de un trabajo conjunto entre la Consejería y las organizaciones agrarias sobre los “ecoesquemas”, instrumento clave en el desarrollo de la nueva PAC a partir de 2023, en la mañana de hoy el consejero Juan Carlos Suárez-Quiñones ha presentado la propuesta diseñada por Castilla y León para la aplicación de ecoesquemas en España, que es alternativa al modelo presentado por el Ministerio de Agricultura. A juicio de COAG CASTILLA Y LEÓN, este modelo alternativo es positivo porque resulta más sencillo de aplicar, es más fácil acogerse al mismo para la práctica totalidad de las explotaciones agrarias, sea cual sea su orientación productiva, resulta más atractivo para el profesional y permite, en consecuencia, que no sufran recortes los agricultores y los ganaderos. COAG CASTILLA Y LEÓN confía en que el Ministerio adopte la propuesta consensuada por la Consejería y los colectivos agrarios de Castilla y León.
COAG valora el esfuerzo realizado por la Consejería, tanto a nivel técnico como directivo, para materializar esta propuesta, que se basa en el principio de que los ecoesquemas no han de limitarse a meros pagos compensatorios sino incentivadores, y con el objetivo de fondo de asegurar el nivel de rentas que los profesionales ya disponían en la anterior programación PAC. Además, mediante la propuesta de Castilla y León se simplifica el diseño de las medidas agroambientales y de producción ecológica, frente a la dinámica confusa y enrevesada en la que se ha embarcado el Ministerio.
Según ha informado hoy el consejero “desde Castilla y León se considera necesario modificar el enfoque y el modelo propuesto por el Estado, para dirigirlo a un modelo de diseño único a través de un conjunto de prácticas en la explotación”. Se trata, en definitiva, de conseguir un único ecoesquema ‘integral’ de la explotación que, salvando las distancias, se podría asimilar a los contratos territoriales que aparecían en la Ley 45/2007 de desarrollo sostenible del medio rural, y cuyo desarrollo e implantación había sido reclamado en reiteradas ocasiones por COAG.
COAG CASTILLA Y LEÓN ha solicitado que, ante un presupuesto limitado que requerirá ajustes, el pago por ecoesquema individual de cada perceptor se priorice a las explotaciones de titulares agricultores y ganaderos profesionales, y que se establezcan topes máximos de hectáreas al objeto de evitar que se vean beneficiadas grandes explotaciones y grupos de inversión con fondos buitre, que por la economía de escala y su mejor situación para poner en práctica algunas de las medidas propuestas, podrían acaparar los fondos, de igual forma que se hace en la actualidad con algunas ayudas acopladas.
El modelo alternativo de ecoesquema integral de Castilla y León frente a los nueve propuestos por el ministerio, incluye 28 prácticas de carácter ambiental, que se pueden desarrollar en las explotaciones agrarias del conjunto de Castilla y León y de España. Entre ellas se pueden destacar:
- Aprovechamiento a diente de los pastos por la ganadería respetando unas cargas ganaderas en la superficie.
- Regeneración y protección de sistemas adehesados.
- Rotación espacial de los cultivos de especies diferentes.
- Incluir en la alternativa cultivos mejorantes como: vezas, alfalfa, esparceta…
- Establecer y/o mantener elementos característicos del paisaje.
- Creación de hábitats seminaturales de carácter anual.
- Siembra directa y mínimo laboreo.
- Mantener cubiertas vegetales sobre el terreno.
- Empleo de la fertilización orgánica en las explotaciones.