“Cuando fui a comprar mi tractor, los vendedores se dirigían a mi padre, no podían imaginar que fuera para mí”

EvaTocino

Eva Tocino, vicepresidenta de COAG SALAMANCA, ganadera y agricultora ecológica de San Muñoz, reivindica la labor femenina en el desarrollo de los pueblos en el día Internacional de la Mujer Rural, 15 de octubre.

La ganadera salmantina cuenta que comenzó de cero en el campo y que le resultó muy complicado hacerse con parcelas y explotaciones ante el recelo que provocaba, principalmente, por ser mujer.

La vicepresidenta de COAG Salamanca afirma que “hay mucho que hacer y todos los organismos deben implicarse en ello, a la hora de normalizar la labor de la mujer en el medio rural. Hace falta formación y aliento hacia las mujeres”.

Eva marca una estela en su profesión muy peculiar. Se propuso ser ganadera, y ya cuenta con 50 reses; se propuso alimentarlas y ya cuenta con una producción de forraje ecológico para ellas. “Ahora me he propuesto montar una sala de despiece y vender directamente al consumidor; repartirla por Salamanca”, explica.

Según datos recopilados por COAG, “con un 29,6%, frente al 15,4% de la tasa general, el paro femenino en el medio rural duplica las cifras de paro total”.

 

14 de octubre de 2022.- Eva Tocino lleva ya siete años volcada enteramente en las labores agropecuarias, pero todavía se encuentra con gente que le dice “qué valiente eres”, o por el contrario “dónde vas a ir tú”. Ser mujer campesina en el medio rural tiene sus lastres.

Por todo ello, la ganadera de San Muñoz sostiene que “las mujeres en el entorno rural deben plantar cara a discriminaciones como las relativas a la propiedad, a la remuneración por el trabajo o a la capacidad de decisión”. Y concluye lapidariamente: “no somos menos que nadie por ser mujeres”.

La vicepresidenta de COAG Salamanca tuvo muy clara, desde el principio, su vocación agraria. Aunque rápidamente se topó con una de las trabas endémicas del territorio rural: la formación. Eva es arquitecta técnica. O sea, está laboralmente en las antípodas de la agronomía. Aprender esta profesión fue complejo. “Me costó mucho formarme. Este oficio no es nada fácil y hacerlo bien requiere mucho consejo de la gente que lleva tantos años al frente de sus explotaciones”.
Y por ello, recaló en COAG, porque sabe la gran labor de formación que pueden desempeñar las organizaciones agrarias con la gente que empieza.

En este sentido, Eva Tocino asegura “hay mucho que hacer y todos los organismos deben implicarse en ello, a la hora de normalizar la labor de la mujer en el medio rural. Hace falta formación y aliento hacia las mujeres”.

Según datos recopilados por COAG, “con un 29,6%, frente al 15,4% de la tasa general, el paro femenino en el medio rural duplica las cifras de paro total”. Y explica por qué: Las mujeres rurales “se dedican al trabajo doméstico no remunerado lo que es fruto indiscutible de la muy marcada segregación de roles por género que pervive en el medio rural”.

Afortunadamente Eva Tocino, se salva de la estadística. Eva marca una estela en su profesión muy peculiar. Se propuso ser ganadera, y ya cuenta con 50 reses; se propuso alimentarlas y ya cuenta con una producción de forraje ecológico para ellas. “Ahora me he propuesto montar una sala de despiece y vender la carne que produzco, directamente al consumidor; repartir por Salamanca y enviar fuera de la provincia”, comenta la ganadera de San Muñoz.
Precisamente es en los canales cortos de comercialización alimentaria donde existe una sobresaliente participación femenina. Según CERES, asociación de mujeres de COAG, “Son muchas las experiencias de éxito alrededor de las cadenas cortas que tienen rostro de mujer.”

Eva Tocino vive con ilusión su profesión, y desde esa confianza, envía un mensaje a todas aquellas mujeres que tienen una explotación o piensan en comenzar: “Les mando mucho ánimo. Lo más importante son la ilusión y las ganas. No somos menos que nadie por ser mujeres; lo que cuenta son las ganas de trabajar y sacar adelante lo tuyo”.