La Administración incumple los plazos de su propia Orden de daños, pues resuelve solicitudes en un plazo superior al de los seis meses desde su presentación y hasta con dos y tres años de retraso
Indigna el constatar como la Dirección General de Patrimonio Natural y Política Forestal resuelve en sentido totalmente contrario al propuesto por el Instructor nombrado por el Servicio Territorial de Medio Ambiente de Zamora, pues este último ha emitido propuestas de resolución reconociendo y valorando justamente los importantes daños soportados por los agricultores en sus cultivos
Zamora, 7 de Octubre de 2024.- Desde la Alianza UPA – COAG mostramos nuestro malestar al constatar como recientes resoluciones firmadas por Dº José Ángel Arranz Sanz, Director General de Patrimonio Natural y Política Forestal, desestiman las solicitudes de pagos presentadas por los agricultores por daños y perjuicios en cultivos dentro de la Reserva Regional de Caza de la Sierra de la Culebra y referidos a la campaña agrícola 2021/2022.
Y la base principal del argumentario en dichas resoluciones desestimatorias no es otro que la tardanza y/o ausencia en la comunicación de los daños por parte del interesado a lo largo del ciclo productivo, es decir desde otoño del 2021 a verano 2022, porque así es preceptivo en la Orden de pagos. Pero esta circunstancias es incierta, pues si le fue comunicado el daño al Agente Medioambiental por parte del perjudicado. La propia resolución reconoce que el celador que emitió el informe que dirige al Servicio Territorial conocía de la existencia del daño desde el primer momento (otoño / 2021). Así en uno de los puntos de la resolución se recoge: “el informe suscrito por el celador de medio ambiente, pone de manifiesto que el daño ha sucedido entre otoño del 2021 y verano del 2022, en el cultivo del cereal, comidos por los ciervos, con un % de daño del 100% de la superficie total de las distintas parcelas”.
Debe considerarse que en esta tipología de siniestros en cultivos, los daños que se soportan no son puntuales y referidos a un momento concreto como puedan ser los de los ataques de lobos, sino que se van sucediendo en el cultivo de forma continuada durante todo el ciclo productivo del cultivo, pues bien sea el ciervo, bien sea el jabalí, actúan en ellos de forma permanente. El perjudicado no puede comunicar día si, día también, la existencia de nuevos daños, comunicando así los siniestros permanentemente, y de ello derivado, las correspondientes y consecuentes solicitudes de pago.
El perjudicado si comunica al Agente Medioambiental la existencia de daño ya al comienzo de la campaña, a fin de que se constatase y se haga seguimiento, siendo consciente que es difícil valorar la evolución futura del cultivo, y por tanto el daño real final. Concluido el ciclo productivo, previo a la cosecha (en verano 2022), el perjudicado comunica al Agente Medioambiental la existencia de daños reales en las parcelas, cuestión ésta que es corroborada por el Celador, quien estima en determinados casos un daño del 100% en la superficie total de las distintas parcelas. Posteriormente, y de forma más o menos inmediata, se procede a presentar solicitud de indemnización por parte del agricultor.
Hay que considerar también que en verano de 2022 se produjeron los importantes incendios en la Reserva, y la disponibilidad de tiempo y personal de los Agentes fue mucho más limitada, coincidiendo los incendios con el final de ciclo de muchas de las producciones de cereales.
Pues bien, a pesar de todas estas consideraciones, desde la Dirección General de Patrimonio Natural se considera no se ha cumplido con el dictado literal de la norma referido a las fechas de comunicación del siniestro, y dicta resoluciones definitivas que contravienen las propias emitidas por el Servicio Territorial de Medio Ambiente de forma previa, que venían a reconocer la existencia del 100% de daño.
Es por todo ello que desde la Alianza UPA – COAG exigimos a la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio que atienda todos aquellos recursos de reposición que contra la desestimación se puedan presentar, y animamos a los afectados a su presentación.
De no ser así, no descartamos el convocar acciones de protesta en demanda de lo que consideramos en justicia procede, que pasaría por atender las solicitudes al menos conforme las propuesta de resolución emitidas inicialmente por el Instructor del Servicio Territorial de Medio Ambiente de Zamora, pues en ellas el daño se ha constatado y valorado.