
Reunión del Consejo de ministros para la declaración de zonas catastróficas
Sólo un esfuerzo coordinado de Junta y Gobierno central puede hacer que el apoyo que reciban las zonas y los sectores afectados esté al nivel de la magnitud del desastre que están sufriendo. Entre estas medidas deben incluirse ayudas directas para los profesionales agrarios y ganaderos.
Estamos ante una situación catastrófica en Castilla y León: cerca de 200.000 hectáreas quemadas, localidades que han visto arder la mayoría de sus casas, espacios con alto valor medioambiental y cultural destruido, y lo peor de todo, la pérdida de vidas humanas, para las que no hay reparación posible
Valladolid, 25 de agosto de 2025
La lacra de los incendios que está sufriendo el noroeste peninsular, y muy particularmente nuestra Comunidad Autónoma, hace completamente imprescindible la implicación de las Administraciones central y autonómica para que los apoyos que precisan las zonas afectadas se correspondan con la magnitud del desastre que estamos viviendo. COAG realiza esta petición en víspera de la reunión que mañana celebrará el Consejo de ministros para la declaración de “zonas catastróficas” por los incendios.
Por tanto, la reunión del Consejo de ministros de mañana es una excelente oportunidad para acordar medidas excepcionales y para comprometer un presupuesto generoso para su financiación, en colaboración con las CC.AA. Entre estas medidas deben incluirse las ayudas directas para los profesionales agrarios y ganaderos que han sufrido daños y pérdidas en sus explotaciones y bienes, así como para compensar el lucro cesante durante el tiempo que las explotaciones tardarán en recuperar el nivel productivo que tenían antes de los incendios.
Los datos avalan que estamos ante una situación realmente catastrófica en Castilla y León: cerca de 200.000 hectáreas quemadas, localidades que han visto arder la mayoría de sus casas, espacios con alto valor medioambiental y cultural destruido, y lo peor de todo, la pérdida de vidas humanas, para las que no hay reparación posible.
En nuestro país conocemos bien las situaciones dramáticas ocasionadas por desastres naturales, y cómo ante ellos se han puesto en marcha planes específicos de apoyo a los afectados y de reconstrucción, financiados tanto por el estado como por las CC.AA. implicadas, y que han movilizado miles de millones de euros. Tal es el caso de la DANA de finales de octubre de 2024. El importe de la cuenta de daños provocados por los incendios en el presente verano, que continúa agrandándose, hace necesario un trato similar por parte de Gobierno central y Junta de Castilla y León.
Somos conscientes de que hay otros sectores damnificados por los incendios, pero la enorme extensión quemada hace que la agricultura y las actividades ganaderas, particularmente la extensiva y la apicultura, sean de las más afectadas. Es necesario por tanto que todas las Administraciones competentes actúen con verdadero compromiso para atender y no dejar abandonados a los profesionales agrarios. Si bien valoramos la rápida respuesta dada en la atención de las necesidades de alimentación y de agua para el ganado y/o colmenares, llevado a cabo por la Junta de Castilla y León, así como el anuncio de otras medidas recogidas en el Acuerdo 34/2025 del 20 de agosto, es claro que la situación excede con mucho de las posibilidades de una sola administración.
Así ha quedado de manifiesto tras la reunión mantenida el pasado viernes entre la consejera de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, María González, y los responsables de las organizaciones agrarias. Como resumen de dicha reunión, una certeza: que el importe que la Junta destinará a compensar las pérdidas es totalmente insuficiente para atender todas las necesidades. Por ello, la implicación del Gobierno central es, no solo necesaria, sino imprescindible.