Nuestra organización considera que Castilla y León debe estar catalogada como región con `afección alta´ de sequía, puesto que el secano está absolutamente perdido en muchas zonas, y no tenemos pastos y forrajes para la ganadería
UPA-COAG reclama a Gerardo Dueñas que, una vez aprobado el real decreto-ley del Gobierno, anuncie ya las medidas de la Consejería para complementar y ampliar las puestas en marcha desde el Ejecutivo central
Son imprescindibles ayudas directas extraordinarias para los cerealistas, que en su mayor parte no van a cosechar nada después de afrontar una campaña con costes desorbitados, porque el seguro no resuelve todo el problema
Valladolid, 12 de mayo de 2023.-La Alianza UPA-COAG valora el real decreto-ley aprobado en el Consejo de Ministros que contempla ayudas directas y medidas en los ámbitos fiscal, financiero y socio-laboral. Sin embargo, no compartimos que Castilla y León esté considerada con `afección media´ cuando lo más justo sería que estuviéramos dentro de las regiones con `afección alta´.
Nuestra organización llevaba tiempo exigiendo a las administraciones que dieran un paso al frente y aprobasen medidas con carácter de urgencia ante la situación dramática del campo. El primer paso lo ha dado el Gobierno central y ahora esperamos que con suma diligencia la Junta de Castilla y León deje de esconderse y complemente las ayudas directas y el resto de medidas adoptadas desde Madrid.
De lo conocido hasta ahora, se aporta más claridad en relación al sector ganadero. De las ayudas directas, 355 millones de euros serán para los sectores cárnico y lechero de vacuno y ovino-caprino. El decreto establece que Castilla y León, al ser considerada “zona de afección media” recibirá unas cuantías unitarias de ayuda de 78,5 euros por vaca de carne y 9 euros por oveja y cabra de carne; y de 30,5 euros por vaca de leche y 5,5 euros por oveja y cabra de leche, que son la mitad de las que percibirían si estuviera entre las CC.AA. de “afección alta”.
Hay que tener en cuenta que estas cantidades tienen ciertas excepcionalidades. Y es que en vacuno de carne, se cobrará el 100 % de la ayuda en las 250 primeras vacas. En el resto, la ayuda será del 50 %. En vacuno de leche, la cuantía se cobrará como mucho en los primeros 725 animales. En ovino y caprino, el 100 % de la ayuda será para los 2.000 primeros animales, y el 50 % para el resto. Las ayudas se abonarán directamente a los titulares de las explotaciones que sean beneficiarios de ayudas de la Política Agraria Común (PAC) a través del Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA).
Para el sector agrícola se destinarán 276,7 millones y 5 millones para la apicultura, pero sin conocer aún a quién irá dirigido y cómo se distribuirán esos pagos. La Alianza UPA-COAG reclama que las ayudas sean para los sectores más perjudicados y que sobre todo se priorice a los profesionales que coticen en la seguridad social agraria. En todo caso, son imprescindibles ayudas directas extraordinarias para los cerealistas, que en su mayor parte no van a cosechar nada después de afrontar una campaña con costes desorbitados, porque el seguro no resuelve todo el problema.
El real decreto-ley amplía la subvención a los seguros agrarios ya contratados hasta cubrir el 70 % del coste de la póliza del seguro de sequía en los cultivos de secano. Al respecto del seguro, desde la Alianza UPA-COAG también exigimos a la Consejería de Agricultura que con presupuesto autonómico se amplíe el porcentaje de indemnización de daños desde el 70 % que cubre Agroseguro hasta el 100 % de las pérdidas.
También valoramos medidas de flexibilidad en la aplicación de la nueva PAC, así como la ampliación hasta el 30 de junio del plazo de presentación de solicitudes de las ayudas. En este sentido, exigimos al Gobierno regional que flexibilice las normas autonómicas en distintas actuaciones agronómicas que la Alianza UPA-COAG solicitamos días atrás al objeto de que la sequía no represente un impedimento añadido para la percepción de las ayudas de la PAC.
Por otro lado, la Alianza UPA-COAG reclama que en las medidas de carácter fiscal y en el resto de las ayudas que puedan ponerse en marcha no se hagan distinciones entre pueblos de la misma zona, puesto que no tiene ningún sentido que se diferencia el grado de ayudas entre ellos cuando la sequía les ha afectado exactamente igual. Por lo tanto, no debe tenerse en cuenta la base de datos de los índices de módulos de rentas, que varía dependiendo de si los ayuntamientos han hecho o no la petición en su día, y sí conforme al sentido común de que pueblos colindantes tienen el mismo daño.
Nuestra organización no comparte que el real decreto contemple un aplazamiento del pago de las cuotas a la Seguridad Social porque reclamamos la condonación del mismo. Por otra parte, teniendo en cuenta que tras varias campañas críticas al sector le queda poca capacidad de endeudamiento, y por tanto es incierta la disponibilidad del mismo a adquirir nuevos préstamos, valoramos la bonificación de hasta el 15 % del principal establecida por el Gobierno. A este respecto, pedimos a la Consejería que se sume a apoyar la liquidez de las explotaciones de los profesionales bonificando bien otro 15 % del principal o bien los intereses de los préstamos que se acojan a esta medida.
Por lo tanto, la primera valoración sin entrar en profundidad, del real decreto-ley es que vemos con buenos ojos que por fin se empiecen a concretar ayudas directas. Sin embargo, nos parecen insuficientes, y por lo tanto en esta coyuntura reclamamos a la Junta de Castilla y León que escuche las peticiones realizadas por la Alianza UPA-COAG desde hace días y que complemente, al menos, hasta el mismo nivel las ayudas directas aprobadas por el Ministerio en las últimas horas. El Ejecutivo autonómico ya no tiene ninguna coartada para seguir “escondida” mirando a Bruselas o a Madrid.