El campo de Castilla y León recibe cada año a 10.000 trabajadores extranjeros para recoger, principalmente, uva y patata.

Vendimia

COAG celebra la renovación del convenio para la organización de los flujos migratorios en la agricultura, una idea que la organización impulsó hace años y que hoy rubrican las opas, los sindicatos, los municipios y los productores.

Valladolid, 30 de octubre de 2020.  Los denominados “temporeros”, más correctamente “trabajadores en campañas agrícolas de temporada” procedentes de otros países (Centroeuropa, norte de África, e Hispanoamérica) circulan en la actualidad por toda España sin que ello ocasione significativos problemas, más allá de los puntuales y cada vez más escasos. Este año, en el seno de algunos de estos grupos floreció con desgraciada fertilidad el coronavirus, debido principalmente a algunos empresarios desaprensivos que no atienden ni siquiera los requisitos mínimos de humanidad. Hace unos años, la situación era más tensa porque los trabajadores viajaban por España sin papeles, ni contratos, ni hogar, ni cobertura sanitaria. Levantaban campamentos a las afueras de los pueblos y generaban cierta intranquilidad.

COAG vio el fenómeno y comenzó a organizarlo: hoy los trabajadores vienen con contratos en origen, reciben atención médica, hogar y mejores salarios. La organización de estos flujos migratorios mereció incluso varios reconocimientos  a COAG, entre ellos, un premio otorgado por la Casa Real española.

El  viernes 30 de octubre, el BOE publicó la renovación de este convenio “para la ordenación, coordinación e integración sociolaboral de los flujos migratorios laborales en campañas agrícolas de temporada”, que ya rubrica el sector agrario en pleno y otros organismos. A saber: las organizaciones agrarias representativas a nivel estatal, los sindicatos de clase, la federación de municipios, el Gobierno, los productores de frutas y hortalizas.

Por su parte, Castilla y León recibe cada año a unos 10.000 trabajadores de campañas agrícolas de temporada según los organismos laborales regionales. Los cultivos que suelen emplearlos son vid, patata, ajo, fresa y puerro. La contratación en nuestra región se hace directamente en España, puesto que las labores de recogida de estos cultivos son más cortas que las de frutas y hortalizas que se desarrollan, principalmente en Levante y es desde esta zona desde donde acuden los trabajadores encadenando campañas.

El Convenio en cuestión publicado ahora en el BOE, tiene por objeto establecer la colaboración entre las entidades firmantes del mismo, con el fin de asegurar una gestión eficaz de los flujos migratorios laborales, interiores y exteriores, en el sector agrario, de manera que se disponga en cada momento y lugar de los trabajadores necesarios, se garantice el cumplimiento de las normas laborales y de inmigración, de las condiciones de trabajo y de alojamiento, cuando éste resulte necesario, y se proporcione la adecuada información y asesoramiento en materia de derechos y obligaciones sociolaborales.

Para cumplir el objeto y los fines pactados, COAG se compromete a coordinarse con las diferentes administraciones en la ejecución de las siguientes actuaciones:

  • Propuesta de Planificación y organización de las campañas agrícolas de temporada.
  • Promover el cumplimiento del acuerdo de buenas prácticas en la contratación de trabajadores para el desarrollo de labores agrícolas y supervisión de su aplicación en todas las campañas agrícolas.
  • Balance del desarrollo de las campañas agrícolas de temporada.
  • Análisis y cuantificación de las necesidades de mano de obra de las empresas agrarias, especialmente de las que deban ser atendidas con personas trabajadoras migrantes, y en particular, de las que requieran ser contratadas en origen.
  • Realización de procesos de contratación de personas trabajadoras en el mercado interno y, en su defecto, solicitud de autorización para llevar a cabo los procesos de selección en los países de origen de trabajadores extranjeros.
  • Organización de los desplazamientos de los trabajadores migrantes y de las acciones que aseguren el adecuado asesoramiento en derechos y obligaciones en materia social y laboral, atendiendo singularmente la idoneidad del alojamiento de los trabajadores. Asesoramiento e información sociolaboral a los trabajadores, con especial atención a aquellos trabajadores que se encuentran en una situación más vulnerable.
  • Acciones de formación para las personas trabajadoras, con especial atención a las personas contratadas en origen con autorización de residencia y contrato temporal de trabajo de duración determinada.
  • Coordinación con los servicios sociales y sanitarios, así como con otras entidades colaboradoras, en cada una de las campañas de temporada.